Es la especialidad que se encarga de rehabilitar la forma y función de los dientes presentes en boca, así como la reposición de los dientes perdidos mediante coronas, puentes, carillas o incrustaciones.
Gracias a la prótesis dental podemos restaurar la anatomía o ausencia de los dientes, devolviendo la correcta relación entre los maxilares.
Cuando perdemos uno o varios dientes perdemos función y estética. Se altera la posición de los dientes vecinos y antagonistas, favoreciendo enfermedades periodontales, caries, problemas de articulación de la mandíbula, disminución de la eficacia masticatoria, atricción, desviación mandibular, pérdida de dimensión vertical, disfunción de la articulación temporomandibular, pérdida de hueso alveolar.
La recuperación de los dientes perdidos o la restauración de su anatomía, nos da nuestra imagen original y nos permite recuperar totalmente una masticación correcta, con efectos beneficiosos sobre la digestión y por lo tanto sobre nuestra salud.
Existen multitud de opciones de tratamiento: prótesis de quitar y poner (removible), prótesis fija sobre implantes o prótesis fija sobre diente natural, siendo necesario un diagnóstico y estudio personalizado para elegir la mejor opción para el paciente.
Dentro de la prótesis, podemos disponer de soluciones mínimamente invasivas con un tallado muy conservador del diente, tales como las carillas y las incrustaciones.
Dependiendo del caso se personalizará el material, pudiéndose realizar prótesis metal-cerámica, de cerámica sin metal, de porcelanas de alta resistencia como la alúmina o el circonio, o con sistemas de diseño CAD-CAM. Solamente utilizando los materiales adecuados a cada caso, el pronóstico será favorable a largo plazo.